Hugo Chávez suscribió un nuevo acuerdo militar con el presidente Ruso, Dmitri Medvedev por 2.200 millones de dólares en tanques, misiles y baterías antiaéreas. Esto se suma a las compras por 4.400 que ya había hecho.
Chávez anuncio que haría una nueva compra de armas, esta vez de 92 tanques, 300 carros blindados y un número indeterminado de misiles antiaéreos y cohetes de gran alcance.
Chávez siempre ha basado el discurso de su gobierno sobre la retorica de un supuesta invasión de Estados Unidos a su territorio vía Colombia. Y, a decir verdad, poca gente, incluido el gobierno de Washington se lo tomaba en serio, lo veían más como una inteligente oratoria antiimperialista para cautivar las masas Venezolanas.
Pero las cosas están empezando a cambiar. “No queremos la guerra, la odiamos pero debemos prepararnos para ello, Estamos en el numero uno de la lista. Venezuela. Somos el primer blanco del imperio, usando Colombia y las bases de Aruba y Curazao. Nos están rodeando”, dijo Chávez recientemente en su programa de televisión.
Frases como esta generan inquietud, sobre todo porque el presidente Venezolano no solo tiene la lengua larga para hablar sino que está dispuesto a llevar a cabo lo que dice. Muchas veces amenazo con disminuir la importaciones Colombianas, y en los últimos meses se ha evidenciado un claro bloqueo de los empresarios de este lado de la frontera. Aunque hace dos años dijo que movilizaría 10 batallones a la frontera y nadie se movió, los tanques que está adquiriendo le dan una nueva dimensión a esas amenazas. Tampoco ha sido solo carreta el respaldo que, por lo menos muchos de sus hombres cercanos, le han dado a las FARC. El gobierno Colombiano tiene evidencia de que desde hace varios años y aun hoy, personas destacadas del chavismo han servido de puente para que la guerrilla adquiera armas, municiones, dinero y otros recursos bélicos como lanzacohetes.
Colombia tiene un aparato militar diseñado para su guerra interna, para combatir el narcotráfico. Colombia tiene unas fuerzas armadas 10 veces más numerosas que las de Venezuela, tiene 5 veces más helicópteros, pero sus aviones de combate no le dan en los talones a los de Chávez, no tiene tanques ni misiles ni sistemas antiaéreos.
Manuela Castaño
Fuente: Revista Semana
Chávez anuncio que haría una nueva compra de armas, esta vez de 92 tanques, 300 carros blindados y un número indeterminado de misiles antiaéreos y cohetes de gran alcance.
Chávez siempre ha basado el discurso de su gobierno sobre la retorica de un supuesta invasión de Estados Unidos a su territorio vía Colombia. Y, a decir verdad, poca gente, incluido el gobierno de Washington se lo tomaba en serio, lo veían más como una inteligente oratoria antiimperialista para cautivar las masas Venezolanas.
Pero las cosas están empezando a cambiar. “No queremos la guerra, la odiamos pero debemos prepararnos para ello, Estamos en el numero uno de la lista. Venezuela. Somos el primer blanco del imperio, usando Colombia y las bases de Aruba y Curazao. Nos están rodeando”, dijo Chávez recientemente en su programa de televisión.
Frases como esta generan inquietud, sobre todo porque el presidente Venezolano no solo tiene la lengua larga para hablar sino que está dispuesto a llevar a cabo lo que dice. Muchas veces amenazo con disminuir la importaciones Colombianas, y en los últimos meses se ha evidenciado un claro bloqueo de los empresarios de este lado de la frontera. Aunque hace dos años dijo que movilizaría 10 batallones a la frontera y nadie se movió, los tanques que está adquiriendo le dan una nueva dimensión a esas amenazas. Tampoco ha sido solo carreta el respaldo que, por lo menos muchos de sus hombres cercanos, le han dado a las FARC. El gobierno Colombiano tiene evidencia de que desde hace varios años y aun hoy, personas destacadas del chavismo han servido de puente para que la guerrilla adquiera armas, municiones, dinero y otros recursos bélicos como lanzacohetes.
Colombia tiene un aparato militar diseñado para su guerra interna, para combatir el narcotráfico. Colombia tiene unas fuerzas armadas 10 veces más numerosas que las de Venezuela, tiene 5 veces más helicópteros, pero sus aviones de combate no le dan en los talones a los de Chávez, no tiene tanques ni misiles ni sistemas antiaéreos.
Manuela Castaño
Fuente: Revista Semana
Me parece que Chavez se está preocupando mas por llenarse de municiones y armas para combatir que por sacar a su país adelante, Venezuela está mal económicamente, debido a los bloqueos comerciales que ha tenido en los ultimos meses y todas las crisis que ha tenido con otros paises. La nación se está empobreciendo pero el presidente sólo piensa en hacer notar sus ideas y luchar contra los que no están deacuerdo con ellas. Solo se ha interesado por combatir, y piensa que las cosas se solucionan con la guerra, tema que se había dejado atras, pero Chavez insiste en estar preparado para esta, lo que causa un descuido en las labores verdaderamente importantes que el tiene que cumplir, como lo son el desarrollo del país.
ResponderEliminarLa inversion de Colombia se ha ido en helicopteros de combate y transporte, que es la urgencia para combatir el conflicto interno, la guerrilla, el narcotrafico... pero no cuenta con tanques, ni cohetes, ni misiles antiarereos como Venezuela.Por eso la exhorbitante compra de armas de Hugo Chevez y el agresivo discurso contra Colombia y su relacion militar con Estados Unidos son muy preocupantes, ademas es increible que los paises de UNASUR le pidan cuentas a Colombia por las bases y no a Chavez por su armamentismo.
ResponderEliminarLa politica de Hugo Chavez le llevó a aprobar una nueva constitución, adoptar una política procastrista y "revolucionaria", cuya consecuencia es arruinar a la población y aplastar sus libertades. Asi que yo pienso que Hugo Chavez no ha hecho mas que Hundir la economia de ese País.
ResponderEliminarVenezuela sigue transitando por los problemas de siempre. Las encuestas hablan por si sola, un pais donde reina la inseguridad, el desempleo, la falta de vivienda, la corrupción y el débil piso institucional siguen siendo para los venezolanos ahora más que nunca los graves asuntos a resolver.